lunes, 27 de abril de 2009

ESTRATEGIA PARA DEJAR DE FUMAR

Primero fijar una fecha dentro del proximo mes para que la persona deje de fumar pero esto lo hara la persona fijarse una meta y despues iremos al segundo paso:
(Visualizar el dia en el calendario y visualizarte en el dia a partir del cual ya no fumara mas, Si ya se pudo lograr marcar en el calendario esa fecha.
¡felicidades,esti demuestra que eres un fumador disonante, es decir existe una disonancia cognitiva en tu conducta de fumar (tu pensamiento ya no esta en consonancia con tu conducta de fumador y empiezas a dudar de que el tabaco deba estar en tu vida).
Ahora el método que podemos realizar consiste en una reducción semanal en el consumo de nicotina, de un 100% podemos empezar un 20% de consumo, así progresivamente iremos disminuyendo semana a semana el numero de cigarros fumados cada día hasta llegar a cero, pues se sabe que estas pequeñas reducciones semanales, porque no producen apenas síntomas de abstinencia.
Las primeras semanas deberás eliminar aquellos cigarros que creas sentir poca necesidad de fumarlos, reservando para las últimas semanas, aquellos en los que sabes sientes una fuerte necesidad de consumirlos, y hacer un diario donde escribas los cigarrillos consumidos por dias eso ayudara a llevar un mejor control de esto.
Creo que seria esto una buena estrategia al bajar el nivel de cigarros para asi poco a poco ir eliminando este habito.

sábado, 25 de abril de 2009

DISONANCIA COGNITIVA

Cuando actuamos distinto de lo que pensamos...

El Profesor neoyorquino León Festinger estudió y tradujo a una teoría psicológica que publicó en 1957 con el nombre de The Theory of Cognotive Dissonance (La Teoría de la Disonancia Cognitiva). Por “disonancia cognitiva” llama a la contradicción arriba descripta entre el conocer-pensar y el obrar, contradicción que produce una verdadera molestia al hombre, y que concluye que “debe existir después de que una persona haya tomado una decisión entre dos posibilidades cuando ambas [le] son atractivas”1- (pues, como dijimos, el hombre busca un bien en su obrar). Según este psicólogo se busca que esta disonancia sea reducida mediante un cambio en la acción (lo cual podríamos llamar más honesto y congruente) o en el pensamiento, y a falta del primero se da éste, lo cual es muy común: cambiar la opinión para que concuerde con el actuar, en lo cual se busca la tan ansiada justificación que dé alguna coherencia a sus actos.

Este cambio de opinión no es necesariamente total desde el principio, pero el neoyorquino señala que siendo total es que más se reduce esta disonancia. Festinger menciona algunas cosas en particular con las que el hombre se las rebusca para disminuirla sin tener que cambiar de opinión, pues, como fue demostrado en un experimento que cita, si la gente encuentra otro recurso menos drástico y más sutil para hacerlo recurrirá a éste antes que a aquél. Estas cosas pueden ser una recompensa considerable por determinado comportamiento cuya ejecución evitaría de seguir exactamente sus principios u opiniones, también el deseo de impresionar bien a una persona, o el de evitar una situación desagradable.

Yendo a la teoría en sí en lo que respecta de las comunicaciones, Festinger afirma que una persona, al buscar reducir sus disonancias, acude a aquéllas que la favorezcan en este sentido y rechazará aquéllas cuya influencia aumente las disonancias. Esto es lo que muchas veces decimos vulgarmente “canta las cosas como son, no como la gente quiere escuchar”. Así es que elegirá el programa o el artículo que le dé la razón en ese acto que su pensamiento rechaza.

Un ejemplo en la vida diaria podría ser:
· Cuando una persona se dice no ser celosa pero frente a una situación donde ve a su pareja platicando con una mejer hace notar sus celos haciendo un gran alboroto a su pareja.
· Cuando desimos que estamos a dieta y que no comemos harinas o frituras y mas tarde nos ven comiéndonos unas tostadas.
Estamos actuando de manera contraria de lo que pensamos.

domingo, 19 de abril de 2009

EJEMPLOS DE PREJUICIOS Y ESTRATEGIAS PARA ELIMINARLOS

Existen diversos tipos de prejuicios.
Algunos de ellos son:

el sexismo
el racismo

el etnocentrismo
el egocentrismo


Un ejemplo típico de sexismo es cuando un hombre dice que, “todas las mujeres son locas”, o por el contrario, cuando una mujer dice que, todos los hombres son igualmente brutos.’’ Ambos son ejemplos del prejuicio que nace de pensar que se conoce a todos los miembros de un mismo sexo a partir quizás de alguna que otra experiencia negativa con algunos miembros de dicho sexo.
Racismo: “Los dominicanos son poco inteligentes”. “Me casaré con una chica rubia para mejorar la raza.” “Él es negrito pero tiene buen corazón.” Todos estos son claros ejemplos de racismo.

El egocentrismo: este tipo de prejuicio, se podría decir que es de todos el peor, pues muchos de los prejuicios mencionados anteriormente se desarrollan a partir de éste. El mismo se produce cuando la persona percibe la realidad desde su propio punto de vista.
Para el individuo egocéntrico es normal exaltar su propia imagen y personalidad de una manera exagerada, él/ella está parcializado/a a favor de sí mismo/a o de su situación muy particular. Ella o él intenta siempre ser el centro de atracción y se sobre valora demasiado.

El etnocentrismo se da cuando un individuo piensa que su grupo étnico y su cultura son superiores o mejor a la de otras culturas. No se reconoce así el valor y de las demás culturas, obviando la diversidad cultural. “La comida puertorriqueña es la mejor del mundo.” Cuestionar las tradiciones culturales de otros países sin entenderlas o sin tan siquiera reconocer que otras gentes simplemente son diferentes, son posiciones etnocéntricas. Es muy común que una persona esté “parcializada” a favor de su propia cultura, raza o grupo social. Pero este prejuicio es un estorbo para una persona que desea poseer apertura intelectual reconociendo la diversidad cultural.
La estrategia seria:
Poner en práctica el pensamiento crítico de manera efectiva es necesario comenzar por superar nuestro propio egocentrismo para a su vez ser capaces de superar otros prejuicios que forman parte de nuestro pensamiento. Solamente la auto-reflexión servirá como vehículo para descubrir los prejuicios que obstaculizan nuestra razón.
Por eso es necesario ser más objetivos y más razonables, utilizar más nuestra imaginación y capacidad de auto-crítica, ser capaces de ir más allá de nuestro propio esquemas de pensamiento y estructuras culturales, mirar otros puntos de vista, Así podremos comenzar a desarrollar, de una manera óptima, nuestro pensamiento y convertirnos en hombres y mujeres más prudentes.
Esto es el comienzo de obtener una mente abierta libre de prejuicios.

lunes, 13 de abril de 2009

PUNTO DE VISTA PERSONAL, DE LA CULTURA Y LA PERSONALIDAD

Yo creo que, la cultura es un conjunto de valores, creencias, es la idiosincrasia de una persona, un grupo o un país, estas influyen notablemente en cada persona, en su manera de comportarse, de hablar, de vestir incluso en lo que comen y claro esta en la personalidad de los individuos.
Vamos primero a definir lo que es en si la personalidad:
La personalidad son pensamientos, sentimientos y conductas de un individuo, que persisten a lo largo del tiempo y a lo largo de las situaciones, están son perdurables.
La cultura tiene que influir en el pensamiento de cada individuo en como debe de actuar o dirigirse según su cultura, la conducta que debe de tomar, y esta cultura también se mantiene a lo largo de la vida de este individuo ya que nace dentro de ella y se forma dentro de ella, yo pienso que la personalidad y la cultura están íntimamente relacionadas, van de la mano una con la otra ya que dependiendo las creencias de mi cultura voy a formar mi pensamiento.

viernes, 3 de abril de 2009

PREJUICIOS

PREJUICIOS
Una de las perfecciones de la personalidad la alcanza aquel que consigue eliminar los prejuicios. Ser capaz de juzgar siempre en razón del conocimiento y abstenerse de hacerlo cuando no se tienen datos para asegurar un grado suficiente de certeza es la virtud que distingue a los prudentes. El prejuicio, como su nombre indica, es la idea de razón construida como un pseudojuicio en la que se estiman como ciertas conclusiones que no se han sometido en la mente al contraste de las condiciones de verdad que contienen, o bien porque no se analiza la coherencia del conocimiento adquirido por la correcta relación de las ideas, o bien porque las percepciones son insuficientes para poder aseverar la razón en el juicio.
La defectividad de la personalidad por el prejuicio no afecta tanto a la ligereza con que alguna vez se formulan juicios inconsistentes, sino en que ello se consolide como hábito mental de modo que como norma se establece esa fase inperfecta como el término del propio juicio. La dificultad estriba en que al prejuicio se le concede una categoría definitiva que no le corresponde y por tanto se desconoce la pertinacia del error.
El prejuicio se opone a la duda en la valoración de la inconsistencia posible del conocimiento. Mientras que la duda se fundamenta en que del análisis del conocimiento se sigue el contraste entre lo cierto y lo incierto que el mismo contiene, lo que conduce a su verificación y ampliación, en el caso del prejuicio se da por cierto poder juzgar sobre un conocimiento incipiente aduciendo que la parte de desconocimiento que pudiera afectarle se suple por la propia experiencia sin necesidad de contraste con la realidad.

No es extraño que los prejuicios arraiguen en la personalidad de muchos ciudadanos en virtud de herencias culturales o prevenciones raciales o religiosas. Cuando se estimula en la familia la consideración de las cosas en virtud de la tradición y no de como las cosas realmente son, enseñando a observar metódicamente los comportamientos sin que se propicie el análisis del por qué y el cómo, necesariamente se fomenta el prejuicio, pues todo aquel comportamiento que no esté perfectamente integrado en esos cánones será considerado como un alteración sin entrar a valorar causa o razón

LA CULTURA Y LA PERSONALIDAD

Es importante considerar el factor tiempo al definir la personalidad, se debe tener en cuenta la persistencia de los patrones de pensamiento, sentimiento y comportamiento, al menos por largos períodos de tiempo, aunque también se consideran el aprendizaje, el ambiente y los estados anímicos como elementos de influencia para la personalidad. Morris (1997) al definir el concepto habla de un “patrón característico de pensamientos, sentimientos y conductas de un individuo, que persisten a lo largo del tiempo y a lo largo de las situaciones”, distinguiéndose de tal definición, las diferencias características y la estabilidad y perdurabilidad. Gordon (1997) expone la personalidad como una “serie de características personales distintivas, entre otras sus motivos, emocionales, valores, intereses, actitudes y competencias”.
Ivencevich (2005) toma la definición de Eysenck y la modifica expresando que es “un conjunto relativamente estable de sentimientos y comportamientos que se formaron de manera significativa por medio de factores genéticos y ambientales”, además expone que las principales fuerzas que influyen en la personalidad son: las fuerzas culturales, la fuerzas hereditarias, las fuerzas de la relación familiar y la clase social y otras fuerzas de pertenencia a un grupo. Robbins (2004) sintetiza la definición de personalidad, señalando que es la “suma total de las formas en que un individuo reacciona y se relaciona con los demás” y expresa que además se determina por tres factores: la herencia, el ambiente y la situación, por lo que se debe comprender que las formas de actuar, relacionarse, sentir y pensar están influenciadas por la herencia biológica, fisiológica y psicológica de nuestro padres.
También influye el ambiente, es decir la cultura, los primeros condicionamientos, las reglas familiares entre otras cosas, por ello hay que tomar en cuenta la idiosincrasia que como mexicanos poseemos para comprender los porqués de nuestras acciones.
El tercer factor, la situación, recientemente aceptado por Robbins, establece que aunque la personalidad del individuo, integrada por la carga genética y la influencia ambiental es relativamente estable, esta cambia dependiendo de la situación que se presente, ya que las exigencias activan aspectos, en ocasiones ocultos, de la personalidad.
Yo creo que forman un circulo y se retroalimentan, yo estoy convencida de que los sucesos de un pais contribuyen a formar un carácter colectivo es decir, la personalidad del país o su cultura, y es por eso que la personalidad individual de los ciudadano puede modificar la cultura arraigada de un país.